Biblia Sagrada

El Gran Interrogatorio Divino: Diálogo Entre Jehová y Job

Entonces, Jehová respondió a Job desde el torbellino y dijo: ¿Quién es éste que oscurece el consejo con palabras sin conocimiento? Cíñete ahora tus lomos como un hombre; Porque yo te preguntaré, y tú me declararás. ¿Dónde estabas tú cuando yo fundaba la tierra? Decláralo, si tienes entendimiento. ¿Quién fijó sus medidas, si lo sabes? ¿O quién extendió sobre ella el cordel? ¿Sobre qué están fundadas sus bases, o quién puso su piedra angular cuando las estrellas de la mañana juntas alababan, y todos los hijos de Dios gritaban de alegría?

¿O quien cerró con puertas el mar, cuando se derramaba saliendo del vientre; Cuando puse las nubes por su vestidura, Y oscuridad por su pañal; Cuando establecí para él mi límite, Y puse barrotes y puertas, Y dije: Hasta aquí llegarás, y no más allá; Y aquí se pararán tus orgullosas olas? ¿Has mandado tú a la mañana en tus días, y haz hecho conocer al alba su lugar; Para que tome los extremos de la tierra, Y sean sacudidos de ella los impíos? Se transforma como arcilla bajo el sello, Y se presenta como un vestido; Pero a los malvados les quita su luz, Y el brazo altivo es quebrantado.

¿Has entrado tú hasta los manantiales del mar? ¿O has paseado por el recinto de lo profundo? ¿Te han sido reveladas las puertas de la muerte, o has visto las puertas de la sombra de la muerte? ¿Has comprendido tú los anchos confines de la tierra? Declara, si sabes todo esto. ¿Dónde está el camino a la morada de la luz? Y cuanto a las tinieblas, ¿dónde está su lugar, para que las lleves a su territorio, y para que entiendas las sendas de su casa? De seguro tú lo sabes, porque entonces naciste, ¡Y el número de tus días es grande!

¿Has entrado a los tesoros de la nieve, o has visto los tesoros del granizo, que tengo reservados para el tiempo de angustia, para el día de guerra y de batalla? ¿Por qué camino se reparte la luz, o se esparce el viento del oriente? ¿Quién preparó un canal para el diluvio, o un camino para el rayo del trueno, para hacer llover sobre la tierra donde no hay hombre, sobre el desierto donde no hay hombre, para saciar la tierra desierta y yermiento hacer germinar la hierba?

¿Tiene el padre la lluvia? ¿O quién ha engendrado las gotas de rocío? ¿De qué vientre salió el hielo? Y la escarcha del cielo, ¿quién la engendró? Las aguas se endurecen como la piedra, y la superficie del abismo se congela.

¿Puedes atar las Pléyades, o desatar las ataduras de Orión? ¿Puedes sacar a la Osa Mayor en su tiempo, y guiar a la Osa Menor con sus hijos? ¿Conoces las ordenanzas de los cielos, y estableces su dominio en la tierra? ¿Puedes levantar tu voz hasta las nubes, para que abundancia de agua te cubra? ¿Puedes enviar rayos, para que vayan, y te digan: Aquí estamos?

¿Quién puso sabiduría en el corazón, o quién le dio entendimiento al espíritu? ¿Quién puede contar las nubes con sabiduría, o quién puede inclinar los odres de los cielos, cuando el polvo se endurece en masa y los terrones se pegan entre sí?

¿Puedes cazar presas para la leona, o saciar el apetito de los leones, cuando están en sus guaridas, o se tienden en emboscada en la cueva? ¿Quién prepara al cuervo su comida, cuando sus crías claman a Dios, y andan errantes por falta de comida?

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